Los Pastores, Axa y Fabricio

Los Pastores, Fabricio y Axa

En el corazón de Shiloh MDR, se encuentran dos almas dedicadas no solo la una a la otra, sino también a una causa mayor que ellos mismos. Los pastores, Fabricio y Axa, unidos en matrimonio y misión, son el pilar de nuestra congregación. Su historia es un relato de amor, fe y entrega inquebrantable, tejido a través de los años de servicio, enseñanza y guía espiritual. Hoy en día, juntos, construyen un legado de esperanza y renovación en nuestra comunidad.

Nuestros pastores Fabricio y Axa González son venezolanos, multifacéticos: hijos, esposos, padres, pastores, músicos, compositores y cantantes, cuyas vidas se entrelazan con la rica herencia cristiana. A los 12 años, ambos abrazaron la fe al aceptar a Jesucristo en sus corazones.

Su formación musical se profundizó con una educación sólida en la escuela "José Ángel Lamas" y una década como directores de Alabanza y Adoración en iglesias en Caracas, Venezuela (Renacer). Este período no solo enriqueció sus experiencias musicales, sino que también les permitió explorar diversos estilos y roles en el ámbito cristiano.

Su influencia trascendió las fronteras venezolanas. En Londres, compartieron estudios musicales y sirvieron en iglesias cristianas, mientras que en Miami, Florida, contribuyeron a la apertura de nuevas congregaciones.

Comprometidos con la visión de su iglesia local en Caracas, también participaron activamente en ministerios sociales, apoyando hogares para niños en situación de calle.

Además, como fundadores del Ministerio de Restauración Shiloh, junto con sus hijas Estefanía y Valery, han ampliado su labor pastoral, compartiendo no solo música, sino también principios espirituales a través de testimonios conmovedores.

Fabricio cuenta con producciones musicales como ADORARTE, ME RINDO y ENAMORADO, mientras que Axa ha lanzado su propia producción titulada UNA NUEVA MELODÍA. Han respondido a innumerables invitaciones nacionales e internacionales, inspirando a través de su música a quienes enfrentan desafíos a adorar y creer en milagros creativos en sus vidas.

Han compartido escenario con destacados artistas cristianos, destacando su compromiso con la música como herramienta para la adoración y el compromiso social.

Ambos fueron ordenados por el Ministerio Obispal Americano, tanto en Venezuela como en Estados Unidos, y también cuentan con la ordenación como Pastores Comisionados por la Iglesia Reformada de América (RCA).

Su vida es un testimonio vibrante de fe, dedicación y el poder transformador de la adoración y el servicio a los demás. Continúan su misión con el firme compromiso de cuidar tanto de sus familias como de sus ministerios, confiando en el apoyo divino para impactar vidas y cumplir su labor con amor y dedicación.